Tratamientos con ácido hialurónico, lo último para reafirmar el cuerpo sin cirugía

Tratamientos con ácido hialurónico, lo último para reafirmar el cuerpo sin cirugía

En este último año los expertos en medicina estética y cirugía plástica están siendo testigos de la alta demanda respecto a los tratamientos de rejuvenecimiento facial. Con el teletrabajo y los cambios en las relaciones sociales, los pacientes comparten una preocupación común: la percepción amplificada de su fisionomía al estar contínuamente expuestos ante la cámara frontal de sus dispositivos digitales. Como la solución por excelencia de la mayoría de estos retoques que elevan los pómulos, redibujan la línea mandibular o definen el contorno de los labios está el ácido hialurónico. El ingrediente remodelador ha sido protagonista en el Congreso Mundial de Medicina Estética y Antienvejecimiento de Montecarlo. Hasta allí nos desplazamos para conocer de primera mano la novedad en dermocosmética que acaba de presentar IBSA Derma. Y es que, desde el Instituto Bioquímico amplían su efectividad más allá del rostro. Es momento de pensar en el rejuvenecimiento a nivel global. Con las nuevas aplicaciones es posible recuperar sin cirugía la tensión y tonicidad de los brazos, las rodillas y demás tejidos que sucumben sin remedio ante la ley de la gravedad. Te contamos todas las novedades.

El cuerpo: el gran olvidado de los tratamientos estéticos


El rostro es el beneficiario de la mayoría de los retoques estéticos que se realizan en la actualidad. Esta es la conclusión a la que ha llegado un estudio de Kantar Health de la mano de IBSA Derma, en el que se descubría que los protocolos corporales no gozan de la misma aceptación debido, en gran parte, a la falta de información. Las pacientes potenciales desconocen las posibilidades que ofrece el campo de la estética para redibujar los contornos, combatir la laxitud y retrasar un envejecimiento que no solo afecta a las facciones sino a todo el cuerpo en su conjunto. En números, desde Kantar Health estimaron que el 80% de los protocolos médicos espécíficos se destinan a embellecer los rasgos faciales, concentrando en ese 20% restante todo lo demás.

El resultado de esta falta de información sobre las posibilidades de los avances en medicina estética corporal es un descuido con respecto al cuidado del cuerpo que afecta incluso a la manera de vestir como la elección de prendas que cubran los brazos, prendas hogadas o la preferencia de trajes de baño de una pieza frente a los bikinis que dejan al descubierto el abdomen. Desde IBSA Derma avisan de que estas inseguridades no hacen más que aumentar conforme pasa el tiempo y que muchas de ellas se concentran en las zonas conocidas como «críticas»: la cara interior de los brazos, el abdomen o las rodillas. ¿La solución? Una nueva aplicaión del ácido hialurónico que consigue corregir la laxitud en los tejidos a través de diez puntos de aplicación en cada área determinada y a tan solo un milímetro de profundidad.

El protocolo que sublima la calidad de la piel

Tersa, gruesa y tonificada: estas son las cualidades principales que presenta la piel durante las primeras décadas de vida, características difíciles de mantener conforme van pasando los años y aún más si se pierde peso o no se practica ejercicio mientras se realiza una dieta de adelgazamiento. Entre las señales que delatan este aumento en la laxitud de los tejidos, las más comunes son la caída de la piel en la cara interna de los brazos (un fenómeno conocido como «alas de murciélago»), el exceso que también se acumula justo encima de las rodillas o la falta de tonificación en el abdomen.

Como solución, desde IBSA Derma presentan un nuevo protocolo de la línea PROFHILO® en 3 pasos con el que remodelar eficazmente cualquier zona del cuerpo: el primero son las infiltraciones de ácido hialurónico ultra puro de alto y bajo peso molecular por parte de un profesional; el segundo se completa inmediatamente después del procedimiento al colocar unos parches con activos antiinflamatorios que aceleran la recuperación de la zona tratada; y, por último, una crema para usar en casa es la encargada de mantener los resultados del tratamiento conforme pasa el tiempo.

«La medicina estética para el cuerpo y el rostro parecen dos mundos aún alejados. Con el nuevo tratamiento específico para el cuerpo finalmente podemos hacer frente a las expectativas de las pacientes, con una solución de calidad que ofrezca resultados inmediatos», declara el Dr. Andrea Margara, Especialista en Cirugía Plástica Reconstructiva Estética, sobre un protocolo de resultados duraderos con el que olvidarse de las puestas a punto exprés de cara al verano y enfocar el cuidado corporal desde un punto de vista basado en el mantenimiento y la prevención. En cuanto a los cambios que pueden esperarse tras el tratamiento, el doctor destaca la mejora en la calidad de la piel, su profunda acción antiedad y una optimización de la textura y el nivel de hidratación. Por último, la aplicación de este tratamiento con acción remodeladora no se recomienda más de dos veces al año con una espera de unos seis meses entre una y otra en el caso de ser necesario.

Fuente: hola.com